EL MAR, LA MAR
No sé, a veces siento nostalgia
de la mar, de su infinito movimiento
de olas apretujándose o
rezumando sosiego,
como un animal extendiéndose
hasta más allá del horizonte
sin poder desentumecerse
del todo, derramándose
en su eterna lucha por apoderarse
de un pedazo de tierra
para asomarse al infinito.
Comentarios
Publicar un comentario